Paros


 

Una construcción típica de la isla de Paros que he dibujado con acuarelas sobre papel tamaño postal.

Paros (en griego, Πάρος, Páros; en latínParus) es una isla griega del archipiélago de las Cícladas, en aguas del mar Egeo, al sur de la isla de Delos y al oeste de la de Naxos, de la que está separada por un canal. Es la tercera isla mayor del archipiélago, con 207 km² de extensión y 118 km de playas. Es una isla sin apenas vegetación, montañosa y con grandes extensiones llanas aptas para el cultivo. Posee dos grandes golfos naturales, el de Nausa y el de Parikia. El municipio tiene una población de 15.278 habitantes,​ conocidos por el gentilicio de parios. En la Antigüedad la isla tenía una ciudad a la que se la denominaba con su mismo nombre de Paros.

UN POCO DE MITOLOGÍA

La mitología griega cuenta que el rey Minos estaba sacrificando a las Gracias en Paros cuando le informaron del asesinato de su hijo Androgeo en Atenas. Él continuó el sacrificio, pero rechazó la corona que adornaba su cabeza y paró las música de las flautas rituales. Se explica así el carácter particular de los sacrificios a las Gracias en Paros en la Antigüedad: sin coronas de flores ni música. Androgeo había tenido dos hijos, Alceo y Esténelo, a quienes Minos había establecido en Paros con sus tíos, los hijos que él había tenido con la ninfa Paria: Nefalión, Eurimedonte, Criseo y Filolao.

Otra leyenda dice que fue colonizada por Paros de Parrasia, que llevó a la isla una colonia de arcadios. Los supuestos nombres antiguos fueron Plateia (o Pactia), DemetriasZacintoHiria, Hileessa, Minoa y Cabarnis.​ Atenas envió una colonia de jonios que aportaron prosperidad y crearon colonias en Tasos, y la de Pario en el Helesponto.

UN POCO DE HISTORIA

En el islote de Sáliagos, entre Paros y Antíparos, los arqueólogos han descubierto las más antiguas huellas de hábitat en las Cícladas (al menos desde el V milenio a. C.)​ Las islas de Paros, Antiparos y Despotikó fueron ocupadas durante todo el periodo Cicládico Antiguo (3200 a. C. - 2200 a. C./2000 a. C.) Entre los lugares más destacados con restos de este periodo, pueden citarse las necrópolis de Kampos, —cuyos hallazgos de cerámica permitieron establecer una división cronológica entre el Cicládico Antiguo I y el Cicládico Antiguo II— y de Plastiras, —que ha dado nombre a una tipología particular de estatuillas pertenecientes a la cultura Grotta-Pelos,​ así como los restos de la cultura Filacopí I presentes en el asentamiento de Parikiá.​

Parikiá también es uno de escasos asentamientos de las islas Cícladas que ha conservado restos arqueológicos de la cultura minoica media y reciente.​

En la parte final del periodo micénico llegaron a la isla un grupo de micénicos procedentes del continente. Se instalaron en un edificio de carácter palaciego que fue construido en la acrópolis de Kukunariés y fortificaron el lugar hasta que fue destruido alrededor del 1150 a. C.​

En la época arcaica, Paros fue la patria del poeta Arkíloco, a quien sus compatriotas erigieron un monumento funerario, el Arquiloqueo, del que se han conservado algunos restos. Por otra parte, el mármol de Paros fue famoso a lo largo de toda la Antigüedad.

Al comienzo de las guerras médicas la isla dependía de Naxos y estaba del lado de los persas, a quienes apoyó con una nave en la batalla de Maratón. Como castigo fue asolada por la flota ateniense dirigida por Milcíades que pidió un tributo de 100 talentos, pero la ciudad resistió y obligó a los atenienses a retirarse después de 26 días de asedio. Milcíades se hizo él solo una herida en el recinto de Deméter en Paros de la que más tarde murió.​ Después de la batalla de Artemisio, la isla, que continuaba siendo aliada de Persia, mantuvo la neutralidad a la espera de los acontecimientos.​ Temístocles le impuso un tributo al final de la guerra​ y entró en la Liga de Delos, donde pagaba el tributo más alto de todas las islas (30 talentos).

El gobierno fue democrático, dirigido por un senado, pero en la época de la guerra del Peloponeso, en 410 a. C., ya gobernaba la oligarquía, cuando fue allí el general ateniense Terámenes y restauró la democracia. En 387 a. C. entró en la Segunda Liga ateniense. En 385 a. C., en cooperación con Dionisio I de Siracusa, fundó una colonia en la isla llamada Faros en Iliria.​

En 357 a. C. se separó de la Segunda Liga ateniense, pero perdió importancia política. Después de la muerte de Alejandro Magno dependió unos años de los Ptolomeos.

Pasó a Roma y a Bizancio, y después de 1207 fue parte del ducado de Naxos, dentro del cual formó una señoría. En 1573 pasó a los otomanos y en 1830 fue reconocida parte de Gecia.

En la isla se encontró la Crónica de Paros, una relación cronológica de eventos de la Antigüedad, dividida en dos partes: un fragmento se trasladó en 1627 al Reino Unido y el otro fragmento se encontró en 1897 y se conserva en el Museo Arqueológico de Paros.

HALLAZGOS ARQUEOLÓGICOS

En la isla de Paros ha sido descubierta la ciudad homónima que ha restituido restos de muros y un templo jónico del siglo vi a. C. sobre la acrópolis ya habitada en época micénica.
Pocas son las piedras que permanecen en pie del recinto sagrado. Del templo sólo restan los cimientos y algunos elementos que, aunque pertenecientes al lugar sagrado, han aparecido como aprovechados y reutilizados en otras construcciones mucho más tarde.

También sobre la colina de Castro existen restos arqueológicos. Corresponden al santuario de Apolo con un templo dórico (siglo vii-vi a. C.) y dos altares dedicados a Artemisa, ambos pertenecientes a la época arcaica pero a periodos sucesivos.

Fuera de la zona habitada de Paros y junto a muchos otros epígrafes, anastasios Orlandos recuperó en 1961 el que se refiere al poeta Arquíloco. La inscripción está grabada en un capitel corintio posteriormente reutilizado y encontrado en una basílica medieval.

Probablemente no lejos se hallaba el heroon (tumba) del poeta, que habría participado con su padre en la colonización de Tasos.

También podrían pertenecer al monumento algunos relieves funerarios atribuidos a la primera mitad del siglo vi a. C.

Bibliografía

Guía Total: Grecia p. 242. Juan Ignacio Luca de Tena, Grupo Anaya, 2003. 

https://web.archive.org/web/20150909031507/http://www.statistics.gr/portal/page/portal/ESYE/BUCKET/General/NWS_CENSUS_310712_GR.pdf.

Tucídides IV,104; Estrabón X,5,7.

Oliver Dickinson, La Edad del Bronce egea, p.60, Akal, 2000, ISBN 8446011999.

Rafael Agustí Torres, El arte cicládico.

Julio López Saco, Historia y Mito en las Cícladas: una aproximación hermenéutica a los ídolos de mármol, p.6., en revista Praesentia n.º 12 (2011).

Víctor J. Monserrat, Los artrópodos en la numismática de Grecia y Roma clásicas, p.592, en Boletín de la Sociedad Entomológica Aragonesa n.º 50 (30/06/2012): 591‒629. Otros asentamientos de las Cícladas con restos minoicos son Filacopí en MiloAgia Irini en CeosAcrotiri en Santorini y Grotta en Naxos.

Página oficial de las excavaciones de Kukunaries: monumentos (en griego)

Heródoto VI,134-136.

Heródoto VIII,67.

Heródoto VIII,112.

Diodoro Sículo XIII,47.

Chiara Maria Mauro, Los puertos griegos de edad arcaica y clásica en el área egea y jónica oriental: geomorfología, infraestructuras y organización Archivado el 21 de septiembre de 2017 en Wayback Machine., p.353, tesis doctoral, Madrid: Universidad Complutense (2017).

Tucídides IV,104.


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